Aprendizaje colaborativo

Por: Jesús Darío Gónima Sarmiento
El aprendizaje colaborativo, es una filosofía personal que se puede definir como un modelo de aprendizaje interactivo, en el cual dos o más personas trabajan de manera conjunta, para definir un  significado, investigar un tema o mejorar competencias. Debe desarrollarse en un ambiente de respeto, destacando las capacidades y las contribuciones de cada miembro del grupo, compartiendo la autoridad y la aceptación de la responsabilidad de las acciones de los demás miembros del grupo , en donde cada uno es mutuamente responsable del aprendizaje del otro. El consenso  para conseguir una meta en común,  se logra compartiendo experiencias, conocimientos y habilidades (sistema de interacciones).
El proceso de aprendizaje colaborativo se diferencia del cooperativo, en que  son los estudiantes y no el docente quienes definen la estructura de interacciones controlando las decisiones que repercuten en su aprendizaje. Esta característica potencia al estudiante en un ambiente virtual de aprendizaje, porque lo estimula a participar activamente, dejando a un lado el lucimiento personal y la competitividad, en beneficio del grupo; ayudando a sus compañeros; desempeñando diferentes roles incluido el de líder y aplicando las diferentes estrategias, métodos y herramientas ofimáticas y de la web 2.0.
El aprendizaje colaborativo, se apoya en plataformas de gestión de contenidos como moodle, que cuenta con los recursos tecnológicos que permiten interactuar a los diversos integrantes del curso, desde cualquier lugar y en cualquier momento, sobre un wiki o foro de discusión, utilizando herramientas comunicacionales de la web como el correo y la mensajería electrónica, el manejo de calendario, la agenda, los sistemas de reuniones electrónicas y sistemas de conferencia de datos o escritorio. Existe también un software llamado CSCL, aprendizaje colaborativo asistido por computador, que puede ser muy útil para realizar actividades didácticas de este tipo.
El aprendizaje colaborativo, desarrolla competencias como la interdependencia positiva (nosotros en lugar de yo), la responsabilidad, el compromiso individual (el desempeño de cada uno, afecta el desempeño de los otros), la interacción cara a cara (intercambio y procesamiento de información, materiales, de forma más eficiente,  retroalimentanse y motivandose con base en la confianza mutua) las habilidades sociales (saber escuchar, respetar, comunicarse adecuadamente, solucionando diferencias constructivamente) y el procesamiento de grupo (acciones positivas y negativas, análisis de desempeño, realimentación alumno – alumno, docente – alumno).
La interacción en grupo, incrementa los niveles de autoestima y seguridad de los integrantes; se desarrollan habilidades que mejoran el desempeño académico,  cambiando la competitividad por la colaboración, aprendiendo a convivir en grupo, disminuyendo el sentimiento de aislamiento, aprendiendo a hacer consenso, favoreciendo el dialogo, profundizando  la argumentación, el análisis y la autoevaluación, motivando la imaginación creativa. El asumir diferentes roles, prepara al alumno para enfrentar actividades, funciones  y responsabilidades profesionales y sociales futuras.
A continuación se presenta un video propio, en el cual se expone mi experiencia  como participante en grupos de trabajo en los cuales se utilizó el aprendizaje colaborativo:
Ministerio de educación nacional. (1984). Integración Curricular. Ministerio de educación nacional, república de Colombia. Dirección general de capacitación y perfeccionamiento docente, currículo y medios educativos. Santafé de Bogotá.
Lucero, M.M. (n.d). Entre el trabajo colaborativo y el aprendizaje colaborativo. Extraído el 12 de diciembre de 2010 desde http://www.rieoei.org/deloslectores/528Lucero.PDF
UNAD, Diplomado en Tutoría virtual de curso académico, contenido del curso 601006. Consultado el 11 de diciembre de 2010.